Hasta hace unos años, la educación era plenamente presencial y a través de medios tradicionales. El uso de nuevas tecnologías y una metodología de trabajo basada en aplicaciones digitales era solo una idea que se formulaba a medio-largo plazo o propia de los países más avanzados en este ámbito como Suecia o Noruega.

Sin embargo, ante la digitalización de todos los sectores de la sociedad, se percibió la necesidad de cambiar el modelo educativo, cara un modelo basado en las oportunidades que las nuevas tecnologías podían ofrecer hacia el aprendizaje y ampliación de conocimientos. Así, a las ya digitalizadas aulas y herramientas que el alumnado utiliza en su proceso de aprendizaje, se unirán en los próximos años nuevas tendencias como la Inteligencia artificial, la educación inmersiva a través de la realidad virtual y aumentada o el aprendizaje mixto, que crearán un entorno más adaptados y adecuados a los nuevos tiempos.

En este sentido Galicia emprendió ya un camino de adaptación a esta nueva realidad educativa, llegando a posicionarse como comunidad pionera en educación digital, haciendo que despuntara en el último informe Pisa o incluso siendo la primera comunidad en implantar el libro digital en las aulas.